CARCOMA

Las carcomas son insectos especializados en alimentarse de la madera, lo que las convierte en una amenaza significativa para estructuras, muebles y vigas en hogares y edificios. Debido a su gran capacidad de propagación, pueden infestar rápidamente toda una casa si no se controlan a tiempo. Existen diversas especies de carcomas, desde las más pequeñas hasta las de mayor tamaño, algunas tan grandes como un dedo. En grandes cantidades, las carcomas no solo deterioran la madera, sino que también pueden atraer insectos que pican a las personas, lo que representa un riesgo tanto para el patrimonio como para la salud.

Cómo detectar una Plaga de Carcoma

La señal más evidente de una plaga de carcoma son los agujeros que aparecen en la madera. Estos agujeros son las salidas que utilizan los insectos adultos para emerger a la superficie. Si los agujeros están concentrados en áreas específicas, es muy probable que haya una infestación. Es importante asegurarse de que se trate de agujeros profundos y no simples marcas superficiales provocadas por golpes u otros daños accidentales.

 

La fase más destructiva de la carcoma es cuando está en su etapa larval, ya que es en este momento cuando causa el mayor daño al interior de la madera. Si se detectan agujeros, es probable que la infestación ya esté avanzada y sea necesario aplicar tratamientos más complejos y urgentes.

 

Otro indicio de la presencia de carcoma son los montones de serrín que dejan en el suelo. Aunque se alimentan de la madera, también generan residuos que indican que la plaga sigue activa, y este es un momento clave para actuar.

Control de Plagas de Carcomas

Las carcomas depositan sus huevos en pequeñas grietas y rendijas en la madera. De estos huevos emergen las larvas, que se introducen en la madera para alimentarse, comenzando a formar galerías invisibles a simple vista. Durante esta etapa, el orificio de entrada es prácticamente imperceptible.

A medida que la larva crece, continúa creando galerías dentro de la madera hasta que se envuelve en un capullo, conocido como pupa. De este capullo emerge el adulto, que perfora la madera para salir, dejando los característicos agujeros visibles en la superficie.

Para cortar el ciclo de vida de la carcoma y erradicar la plaga de manera definitiva, es necesario realizar un tratamiento en profundidad. Este proceso implica la aplicación de un protector insecticida directamente en la madera, lo que garantiza que los insectos no puedan seguir propagándose.

En Plagas Ibérica, contamos con los mejores tratamientos para combatir plagas de carcoma de manera eficiente y segura, protegiendo su hogar o negocio de daños estructurales. No dudes en contactarnos para una evaluación y tratamiento profesional.

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